Con experiencia, de buen ver, sano, sin malos rollos, no drogas, no alcohol y que conozca bien sus limites. Discreta, atractiva y deseosa de que me dominen. Me presento, soy Jouet es mi nombre de sumisa y tengo 24 años. Vi tu anuncio y quise contactarte por esta razón: Mi adorado amo me pidió buscar un reemplazo temporal en lo que yo, su humilde esclava y mascota, se va de viaje por unos meses. Al leer tu anuncio creo que él sería el amo perfecto para ti, yo no sabía nada de esto hasta que él me introdujo, fue paciente pero firme, y ahora me hizo amar ser una sumisa. Siempre respeto los límites que le puse al principio hasta que yo acepte que ya no hubiera límites. Es todo un caballero alpha, tiene clase, presencia y sabe como tratar a su sumisa, Joven, muy atractivo y atlético.
Aparenta seriedad por fuera pero, a ley que avanza la entrevista, nos deja ver su lado bromista y divertido. Su hablar es pausado y bastante pedagógico, y no gesticula demasiado. Gracias a vosotras por darme la oportunidad de explicar mi punto de aspecto y de romper muchos falsos mitos que lo rodean. Ese es el principal objetivo, desmitificar falsas creencias. Perfectamente, para la mayoría de personas que nos leen, el BDSM Bondage y Disciplina, Dominación y Sumisión, Sadismo y Masoquismo es un mundo un baza desconocido del que se tienen tan sólo unas ideas populares. Cuéntanos tus inicios. Yo descubrí el BDSM con 14 años, en plena etapa de revolución hormonal y de descubrimiento de cosas nuevas.
Palabras como Dominar, someterse, restringir y acarrear dolor son medios para disfrutar y obtener placer; disfrutamos con la vasallaje, con las ataduras y con el dolor, por eso lo hacemos. Empero al hacerlo, es nuestra responsabilidad captar que estamos jugando a un juego peligroso y es nuestra responsabilidad beber medidas para protegernos. Estos palabros son lo primero que una persona que tiene curiosidad por el BDSM debería aprender y grabarse a fuego. Los Dominantes, para entender que el acción de tener a alguien a su merced no les da derecho a hacer lo que quieran sin acordarlo previamente, y los sumisos, para captar que son ellos mismos los que tienen el control real de la situación y los que ponen los límites. Si el que tiene la fusta ignora la palabra de aplomo de la parte sumisa o si no se han pactado límites de antemano, la situación puede acabar bastante mal. Este es el principal alarma de las sumisas, que por mostrarse como tal haya personas que se tomen la libertad de faltarles al respeto, pasando por alto sus límites y sus condiciones. Los Dominantes dicen que encontrar sumisa es difícil; no saben lo que es encontrar un Dominante. Los Dominantes tienen los 4 perfiles de las sumisas de Fetlife que se los saben de memoria; las sumisas tienen que filtrar decenas de solicitudes y cribar lo bravo de lo malo entre fotos de penes no solicitadas, mensajes prometedores, mensajes terroríficos, y ola k ases. La respuesta es no.