Pero quisiera expresar también mi gratitud a muchos colegas y amigos que me han ayudado, directa e indirectamente, a través de discusiones, correspondencia y otros medios. Son, en particular, los siguientes: Dr. Anthony Ambrose, Mr. David Attenborough, Dr. David Blest, Dr.
Existencia nacional desde la cama Luisa Valenzuela A Rodolfo Walsh, en memoria Individuo Sin sospechar la superposición de planos, sin saber nada del campamento general o de la villa miseria, una mujer ha ido a buscar refugio en un cierto alejado club de campo. Se dice, por ejemplo: Nací bajo el signo de Pregunta como otros bajo Capricornio o Leo. Empero la gente de Tetas es pasiva y nutricia, la de Testis afirmativa a ultranza, la de Twin Towers -regida por Mercurio- tiene un favorecedor sentido comercial. Me gustaría tener un poco de todas estas cualidades, por así llamarlas; me gustaría pero no tanto, un poquito, tal vez, cuando las necesite. No lo logra del todo; vuelve al tema. Así es y no puede evitarlo. Se internó, otra no es la palabra, en este club de campo en búsqueda de refugio, para ir viendo despacito, para contestarse sempiternas preguntas. Se internó como en un hospital, no en un bosque, o en el océano, o en el sueño o En busca de refugio.
Entretanto para algunos padres es natural andar en ropa interior por la apartamento, para otros resulta inconcebible que los hijos los vean en paños menores. En este tema, entran en juego muchos factores, como la relación de los seres humanos con su genuino cuerpo. La razón de esta molestia es la culpabilidad que ha sido inculcada por una educación estricta que considera el cuerpo y los órganos sexuales como algo vergonzoso. Al contrario de esta posición, hay quienes sostienen que el desnudo aporta muchos bienes físicos y psicológicos. Hay casos en los que el niño no comprende por qué ciertas partes de su cuerpo son consideradas como nobles y otras como vergonzosas. Por eso, es importante que los padres no promuevan esta noción de vergüenza por su propio cuerpo. Para quienes defienden la desnudez en la familia, es ilógico que los padres se escondan fachada a sus hijos, porque los niños sienten que no tienen derecho a su total confianza. Venimos desnudos al mundo, concebimos desnudos a nuestros hijos. Los psicólogos advierten que las ideas sobre el desnudo cambian con los tiempos.